El Masters 1000 de Madrid nos ha dejado una imagen insólita, pocas veces vista en un torneo de tenis. Normalmente los jugadores llevan varias camisetas de repuesto -lo mismo que sucede con las raquetas- pero Santiago Giraldo debe ser la excepción. El tenista colombiano tuvo que acudir a su box para que su primo le dejara su camiseta para poder seguir jugando el partido contra Hewitt.